jueves, 9 de julio de 2009

Un día en la batea

Nuestro amigo Poldi tuvo la feliz idea de ir a pescar en el día de ayer pues estaba convencido que íbamos a tener un día fantástico de sargos.
Nos convenció y allá nos vamos: Amigo, Poldi y el que escribe, con fuerte viento del Norte, nos dirigimos a nuestra batea pescadora.
Grandes olas, como podéis observar en las fotos, nos hacían muy difícil la navegación.
Amigo, con su filosofía del "fast life" nos hacía la travesía casi tan difícil como el mar. "Disfruta el momento" le pedíamos. Él empeñado en regresar.
Llegamos a la batea, nos ponemos a pescar y en vez de ser un gran día de sargos fue un gran día de bogas.
A los cinco minutos, Amigo ya quería el bocata y la botella de vino; otra vez el "fast life". Amigo no sabe disfrutar el momento.

Comimos nuestro bocata de sardinillas con una buena botella de vino y Poldo haciendo uso de nuestra filosofía de vida "slow life" nos hizo una demostración de todos los artilugios de pesca que posee, cada uno guardado en su correspondiente bolsillo de su ropa de pescador: un artista.
Sobre las nueve de la noche regresamos a puerto con olas de hasta cinco metros, pero nuestro Iscas III sabe comportarse como un gran barco marinero



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