Cada vez lo entiendo peor: Él calvo, yo con pelo. Yo pobre, él rico. Él funcionario, yo currante. Yo pacifico, él aguerrido. Él suplente, yo titular. Creo que las pruebas son contundentes e irrefutables:
Ubaldo en la mili jugaba a la guerra, yo hacía amigos.
Ubaldo en el banquillo, yo en cambio jugando.
2 comentarios:
Está clarísimo, Ubaldo guapo Amigo feo; la prueba evidente en la primera comunión le tuvieron que tapar la cara de lo feo que es.
Amigo,me perdonará quien dejo el comentario de que era feo,siempre fue guapisimo con unos ojazos de sacar el hipo y los colores a algunas damas.
Publicar un comentario